HISTORIA
DEL ARMONIO DE LA VIRGEN DE LOS REMEDIOS.
Hablar del armonio de Cártama es
hablar de un trozo de la historia de España. Este fue donado a don José
González Marín el 9 de diciembre de 1937, por el entonces embajador de España
en Nueva York, señor don Juan Francisco de Cárdenas, para la Virgen de los
Remedios; tal como pone en la placa que lleva adosada.
Juan Francisco de Cárdenas fue el
máximo representante propagandístico de la España franquista y Falange
Española, en la ciudad estadounidense. Regentaba este señor la casa de España
en Nueva York, donde se reunían los inmigrantes españoles y miembros de
Falange; pero no le resultó esta una labor sencilla, ya que a diario tenía que
batallar con los grupos republicanos establecidos en aquel país, cuyo máximo
representante era el profesor socialista y embajador Fernando de los Ríos. La
prensa del país y los grupos de poder consideran el franquismo como un estado
satélite de Hitler y Mussolini, llegando a prohibirse las actividades de
Falange en aquel país. La administración Roosevelt no reconoció el Gobierno de
Franco hasta que no acabó la guerra y aun así siguió apoyando a la guerrilla
antifranquista desde el norte de África.
El historiador americano Allan Chase
(1913-1998) dejó escrito en su obra “Falange. El ejército secreto del eje en
América” (1944); relata como “los Nazis de Burgos enviaron a José González
Marín a organizar las cédulas de Falange en Nueva York y puerto Rico.” Según
este historiador, después de dar varios recitales en la Casa de España, “se
dedicó a su verdadero trabajo en América”. Durante su estancia, González Marín
nombró Jefe de Falange en Nueva York a un español que vivía en 500 West 144th,
Manhattan, llamado José de Perignat; segundo en el cargo a Antonio Gallego y
tercero Abelardo Campa.
Por aquellos días, la mayoría de los 700
miembros de la Casa de España se inscribieron en la organización de Falange
Española; pero tras escuchar un “histérico” discurso pronunciado por González
Marín en una reunión secreta, en el que declaró que todos los miembros de
Falange tendrían que ir a España a tomar las armas y pelear en los frentes, la
mayoría de estos se les “helaron los pies” y “casi todos escaparon por las
salidas más próximas”.
El caso que nos interesa es que,
gracias González Marín y a aquella visita, cuenta Cártama con esta importante
pieza.
Se trata de un instrumento musical más
sencillo que el órgano, que tiene en la parte de abajo lo que se llama
"pedalier" que son unas telas grandes que se tocan con los pies y con
las que se obtienen los registros más graves. Son varios los cartameños que en
este armonio hicieron sus primeros pinitos en la música, con el asesoramiento
de Paco Roldán, el sacristán, una muy buena persona de la que hemos aprendido
mucho todos los que le conocimos, simplemente con su ejemplo. Paco conocía muy
bien este instrumento y lo mantuvo en funcionamiento durante décadas. Lo
desarmaba pieza a pieza y lo reparaba cada vez que el caso lo requería. Hablar
del armonio y recordar a Paco es inevitable.
Tras muchos años en el coro de la Iglesia
Parroquial, casi olvidado, pero en un entorno que aún conserva elementos del
siglo XVI, que tememos que en cualquier momento desaparezcan, precisamente por
el lugar olvidado en que se encuentran. Este año 2020, por fin, le ha llegado
la merecida restauración y se podrán ver en la Ermita de Nuestra Señora de los Remedios,
donde, además, será debidamente cuidado y mimado.
Mis 2 webs (sin publicidad) pueden interesarle a usted: yofrenoelcambioclimatico.blogspot.com (MENOS es MEJOR) y plantararboles.blogspot.com, un manual para reforestar, casi sobre la marcha, sembrando semillas de árboles autóctonos en zonas deforestadas, baldías, más o menos cercanas al lugar de su recolección. Salud, José Luis
ResponderEliminar