Hijo de José Carillo Roldán y Antonia
Ojeda Montes, una familia jornalera, nació el 24 de diciembre de 1855 en el
número cuatro de la entonces llamada “Calle de abajo”.
Por vocación propia, ingresó en la
vida militar el 10 de noviembre de 1874; una época revuelta de conflictos
bélicos en España y sus colonias. Tanto es así, que todos los mozos que podían
acogerse a algún término legal para evitar pasar por el ejército lo hacían,
porque era muy frecuente que fuesen víctimas de las armas, o alguna enfermedad.
Era tan frecuente y tantas las causas
por las que podían morir los jóvenes lejos de su tierra, que antes de partir
solicitaban la protección de la Virgen de los Remedios; y al regresar, los que
regresaban, volvían a subir a la Ermita para celebrar una misa de
agradecimiento, lo que se convirtió en una tradición, conocida como “misa de
los quintos”, que ha perdurado hasta la década de los 60 del pasado siglo XX.
El propio primo de don Manuel Carillo,
llamado José Carillo Orejuela, intento librarse del servicio militar alegando
una serie de defectos físicos y el ser su padre agricultor en la Colonia
Agrícola de Venta de Cártama, por aquellos años propiedad del señor marqués de
Sandoval, y acogida a la Ley de Colonización por la que los hijos de los
colonos estaban exentos de hacer el servicio de armas. Pero el Tribual
encargado de revisar a los mozos para quintas juzgó que no había su padre labrado
estas tierras suficiente tiempo como para acogerse a esta Ley, y lo declararon
acto para el servicio.
Don Manuel Carillo estuvo destinado en
Málaga al Batallón activo provincial Soria nº 17, hasta que el 1º de abril de
1875 pasó a Guadalajara para dedicarse a la instrucción de quintos. Pero lo que
él buscaba era la acción, y antes de dos meses, el 20 de mayo, se encontraba
destinado en el Ejercito del Norte, localidad de Haro (Logroño), entrando en
operaciones de compañía y asistiendo a frecuentes fuegos y combates contra las
fuerzas Carlistas situadas sobre la orilla izquierda del Ebro. En la madrugada
del 4 de noviembre atacó con su compañía y tomó “á la bayoneta” el pueblo de
Briñas, dispersando al enemigo. El siguiente día participó en la toma del
Fuerte de San León, donde fueron tomados como prisioneros sus ocupantes. Formó parte
de la Columna de la Rioja, mandada por el Coronel La Calle, que el 11 de
noviembre siguiente, ocupó las alturas de Peñacerrada y el pueblo de Rivas, el
23 de diciembre el de Labastida, y el 30 de diciembre, al mando de 30 hombres,
ocupó el pueblo de Peciñas, con tan sólo 20 años de edad.
Formando parte su Batallón de la
Brigada de la Rioja, 2ª de la División de Álava, solicitó en enero de 1876 el
mando de la sección de tiradores-exploradores del Batallón, y concedido este
mando, consiguió el dos de marzo siguiente la rendición del Castillo de Peciñas.
Acabada esta guerra pasó con su
Batallón a Valladolid en servicios de guarnición, donde le fue concedida en
septiembre de 1874 la medalla de Alfonso XII; en junio de 1876 fue declarado
Alférez de Infantería en recompensa por los méritos en el Ejercito del Norte; y
en 3 de julio de 1876 fue declarado “Benemérito de la Patria” por haber
contribuido al vencimiento de la insurrección carlista.
El 8 de diciembre de 1876 salió para
Cártama con dos meses de permiso concedidos por el señor Capitán General del
Distrito. Tan sólo dos años después de haber salido de su pueblo, ya era militar profesional y veterano, por lo
que es de suponer que fue recibido con honores de héroe.
Acabado este permiso, se incorporó a
fines de enero de 1877 a su Batallón en Murguria, Álava; donde continuó de
servicio, hasta que en abril de este año pasó a residir en Madrid.
En enero de 1879 se incorpora al
Regimiento de Infantería Aragón nº 21, en Vich, Barcelona. El 6 de abril es
designado para formar parte de la comisión instructora de quintos del reemplazo
de este año, hasta que el 28 de mayo marchó a Barcelona con 20 hombres para
hacerse cargo de los cuarteles y utensilios necesarios para alojamiento de la
fuerza del Cuerpo, que llegaría al siguiente día destinado a la guarnición de
esta plaza.
A petición propia, asistió desde el 1º
de septiembre de este año, a la Conferencia de oficiales de infantería que por
estas fechas se impartía en Barcelona. En estas, ingresó en clase de alumno, y
el 27 de diciembre se inscribió como aspirante para un empleo en el Ejército de
Cuba.
Estando en estos cursos, el 17 de
enero de 1883 contrajo matrimonio en Barcelona con doña María Antonia García
Ger.
El 31 de enero de 1880 terminó el
curso de la Conferencia, y el siguiente 23 de abril de este año ya se encuentra
inscrito para hacer otro de estudios especiales. Todo esto sin olvidar su
objetivo de combatir en las colonias, ya que en marzo de este mismo año, ha
solicitado ingresar en el ejército de Puerto Rico, Cuba y Filipinas. Y en este
empeño continua hasta que el 31 de octubre de aquel año permuta su destino con
otro Alférez para poder ingresar en el Batallón de Reserva de Barcelona nº 16.
Es nombrado Fiscal de la Caja de
Reclutas de Barcelona nº 15, el 28 de junio de 1884; destino que ocupó hasta el
26 de octubre de 1886, en que consiguió el ingreso en la escala de reserva de
Barcelona. En junio de 1889 fija su residencia en San Gervasio de Cassolas
(Barcelona), pero se truncan sus proyectos al ser disuelto su Batallón por una
Real Orden.
De nuevo ha de volver a la instrucción
de quintos, esta vez en el Batallón de Cazadores de Figueras nº 6, al que se
incorporó en Manresa, en septiembre de 1895; y ese mismo mes es ascendido a
Primer Teniente por antigüedad.
Pero no desiste de sus propósitos y
solicita ser destinado al ejercito de Filipinas, lo que le es concedido el 21
de octubre de este año, y el 14 de diciembre embarca en el puerto de Barcelona
en el vapor “Monserrat”; desembarcando en Manila el 12 de enero de 1896.
Es destinado al Regimiento de Línea
Bisayas nº 72, de guarnición en la citada plaza, con el que embarca el 17 de
febrero de 1896 con su compañía para Yligan (Isla de Mindanao), a bordo del
trasporte de guerra “General Álava”, llegando a su destino el día 20, quedó en
servicio de campaña en la “Línea de Operaciones de Yligan á Marahuit”, hasta
que el 23 de abril siguiente regresa en el mismo barco a Manila.
Tras una reorganización del cuerpo de
infantería indígena, quedó su Regimiento dividido en dos Batallones; y se le
nombró “apoderado” del primer Batallón en operaciones de campaña, y el 12 de
septiembre, Secretario de la Comandancia General de las islas de Panay y
Negros. El 17 del mismo mes, declarada ya la insurrección de los Tagalos, pasó
á Cavite, y a las órdenes del General de Brigada, D. Diego de los Ríos y
Nicolau, Comandante General de las tropas de aquella provincia.
En las madrugadas de los días 4 y 5 de
octubre de 1896, atacaron los rebeldes las trincheras españolas de Dalahican
por el istmo de Novelita, siendo rechazados con graves pérdidas.
Posiciones españolas en Dalahican, ismo de
Noveleta, provincia de Cavite.
El 9 de noviembre siguiente participa
en las acciones bélicas de Noveleta, el 10 en la de Benicayan, el 14 y 15 en
los combates de Dalahican y el 26 y 27 en los ataques al campo rebelde y
bombardeo ininterrumpido durante las noches con que desde las referidas
trincheras y campamento del mismo nombre, se batieron y arrasaron todas las
posiciones enemigas comprendidas entre los pueblos de Cavite el Viejo y
Noveleta. El 2 de diciembre pasó de operaciones á las provincias del centro de
la isla de Luzón, siendo nombrado el 13, ayudante de órdenes de su General. El
16 de este mes salió del pueblo de Polo, asistiendo al arrasamiento de los
barrios y caseríos de Biguay, Camunay, Lana y otros, y al ataque y toma de las
canteras de Meycarrayan; y el día 17 a la destrucción de los barrios de Lington
y Malahacan y “casas del cabecilla Francia”, pernoctando en el pueblo de
Meycanayan y mereciendo por su distinguido comportamiento el ser citado en los
partes producidos con motivo de estos combates, en todos los cuales batió al
enemigo al frente de Voluntarios locales de Polo y Meycanayan y condujo además
con gran acierto y diligencia la columna de municiones durante los dos días de
incesante lucha.
El 31 de diciembre de este año de 1896,
y a petición propia, se incorpora en Santa María de Pandí á la columna mandada
por el Comandante de Estado Mayor Don José de Olaguer Feliú, quedando afecto á
la 2ª Compañía del 1er Batallón del Regimiento de Línea Polo nº 73, compuesto
por unos 425 hombres. Con esta fuerza tomó parte el 1º de enero de 1897, en la
operación de Cacarong de Sile, sostenida sobre las alturas y riscos de este
nombre desde las 9 a las 12 de la mañana contra los insurrectos Tagalos allí
acampados y fortificados en número de más de 3000. Al comienzo de la lucha
decidió don Manuel Carillo asaltar la posición enemiga al frente de las fuerzas
a su mando, una sección de la precitada Compañía indígena y voluntarios locales
del citado Santa María de Pandí; y habiendo seguido al asalto el incendio y más
arde la destrucción completa por nuestra columna de todas las posiciones
enemigas, así como el total aniquilamiento del considerable número de rebeldes
que con imponderable heroísmo habianlas defendido, especialmente en la cotta ó
reducto central, quedando sobre el campo de combate más de 1200 cadáveres de
insurrectos y sufrido por nuestra parte unas cien bajas. Conduciendo todos
nuestros muertos y heridos regresó con la columna á Santa María de Pandi en la
noche del mismo día, y al siguiente salió para San Fernando de la Pampanga é
incorporándose a su destino, continuó de operaciones por aquel territorio.
En 12 de febrero, le fue concedido en
empleo de Capitán, por los méritos que en Cacarong de Sile contrajo. Destinado
el siguiente día 28 al Regimiento de Línea Legazpi nº 28, continuó de operaciones
por el centro de Luzon, hasta que el 15 de marzo fue nombrado Comandante
Político-Militar de Pancol (isla de la Paragua), y en comisión, Juez Instructor
de la Capitanía General de Filipinas.
El 30 de marzo llegó a sus manos la
Real Orden por la que se le concedía la Cruz del Merito Militar con distintivo
rojo, en recompensa del mérito que contrajo durante las madrugadas de los días
4 y 5 de octubre del año anterior al atacar el enemigo nuestras trincheras de
Dalahican. Por Real Orden de 27 de abril, fue aprobada la concesión de su
empleo de Capitán.
Cruz del Merito Militar con distintivo rojo.
Ejerciendo como Juez instructor é
instalado en el importante Juzgado del piso alto de la casa nº 22 de la calle
de Magallanes, intramuros de Manila, se declaró un formidable incendio á
primera hora de la madrugada del día 27 de septiembre en la casa nº 31 de la
propia calle, que con rapidez extraordinaria se propagó á las inmediatas. Don
Manuel Carillo rescató personalmente del fuego cuantas causas, expedientes,
papeles, armas de fuego y blancas, municiones, ropas y otros efectos
correspondientes a dichas causas constituían el Juzgado de su cargo; perdiendo
en este acto la totalidad de sus ropas, muebles y ajuar de casa, con el
consiguiente riesgo de su vida.
Por real Orden de 26 de enero de 1898,
se le concede el uso de la medalla de Leales Voluntarios de Filipinas.
Medalla de Leales Voluntarios de Filipinas,
1897.
El 1º de mayo de 1898 participó en la
defensa de la plaza de Manila al ser atacada por la escuadra norteamericana, y
en ella quedó sufriendo el bloqueo y asistiendo a la defensa de la ciudad.
El 11 de junio de 1898, cumpliendo lo
dispuesto en la Orden General del Ejercito de 7 del mismo mes, hizo entrega de
cuantos procedimientos, papeles y efectos pertenecientes al Juzgado susodicho,
siendo seguidamente nombrado Fiscal en juicios sumarísimos-únicos, cuyo
cometido, a la vez que otros servicios de campaña, desempeño hasta el 13 de
agosto en que después de 105 días de sitio, capituló la plaza. Continuó en esta
a la espera de ser embarcado y repatriado, y ejerciendo como Juez Instructor en
procedimientos incoados contra individuos de nuestras fuerzas capituladas.
El 6 de septiembre tuvo conocimiento
de que se la había concedido la Cruz de 1ª clase al Merito Militar, con
distintivo blanco, en recompensa de servicios especiales prestados durante la
campaña de la Isla de Luzón. En 28 del mismo mes tuvo conocimiento de la
concesión que de la había hecho del uso de la medalla conmemorativa de la campaña
de las islas Filipinas.
El 11 de marzo de 1899 hizo entrega de
cuantos procedimientos obraban en su poder y seguidamente embarcó en el puerto
de Manila repatriado por cuenta del Gobierno de los Estados Unidos de América á
bordo del vapor “Buenos Aires” que zarpó en la tarde del mismo día,
desembarcando en el puerto de Barcelona el 10 de abril siguiente, en cuya
ciudad permaneció hasta el 4 de junio que se trasladó a Pizarra (Málaga), en
donde fijó su residencia.
Desde el 1º de julio se encuentra
destinado al Regimiento de Infantería reserva de Málaga nº 69; y en situación
de reserva continuó residiendo en el pueblo de Pizarra. El 9 de agosto se
traslada a Madrid, autorizado por Capitán General de Andalucía, donde quedó
residiendo.
Y residiendo en Madrid, siendo poseedor de la medalla conmemorativa de
la campaña de las Islas Filipinas, le correspondió el uso de los pasadores de
Mindanao y Luzón, en virtud de Real Orden de fecha 19 de febrero del año 1900.
En 1º de junio causó alta en la zona de Reclutamiento de Madrid nº 58.
Por Real Orden de 30 de noviembre de
1900, y como resultado del expediente de juicio contradictorio, le fue
concedida la cruz de segunda clase ó Laureada de la Real y Militar Orden de San
Fernando con la pensión anual de mil pesetas, por su heroísmo y comportamiento
en la acción sostenida en Cacarong de Sile el día 1º de enero de 1897, en cuya
concesión se expresa que: “mandando como 1er teniente una sección del
Regimiento de Línea nº 73 que ocupaba el flanco derecho de una columna de 450
hombres, avanzó en guerrilla sin contestar al fuego enemigo, y cuando lo creyó
oportuno cargó a la bayoneta con la gente sobre las fuertes posiciones de
aquel, compuesto de unos 3000 hombres y con tal decisión, que desprendiéndose
su tropa de la línea de ataque y venciendo cuantas dificultades ofrecía el
terreno, arrolló al enemigo tomándole una trinchera que dejó á retaguardia y
continuando el avance penetró antes que nadie y á la cabeza de su fuerza en la
planicie de los cerros fortificados, apoderándose por asalto del muro de la
cotta ú obra cerrada allí construida, lo más importante del atrincheramiento,
que fue defendido con tenacidad con más de 400 ó 500 armas de fuego, muchas
blancas y unos 8 cañones pequeños, sufriendo el contrario unas 700 bajas y
teniendo por nuestra parte un oficial y 23 individuos muertos y otro oficial y
65 de tropa heridos.”
Concesión
de la condecoración por parte de S.M. D. Alfonso XIII.
Cruz Laureada de San Fernando.
Por Real Decreto del Consejo de
Ministros de fecha 19 de julio de 1902, le fue concedida la Medalla de Plata
conmemorativa de la Jura de S.M. Alfonso XIII.
El 30 de enero de 1904 es destinado al
Ministerio de Guerra, Madrid nº 1. Por Real Orden de 23 de enero de 1908, le
fue concedida la gratificación anual de 600 pesetas correspondiente a los diez
años de efectividad en su empleo. Y el Excmo. Sr. Presidente del Consejo de
Ministros le expide un diploma el 30 de diciembre siguiente, por el que se le
concede la Medalla de Plata conmemorativa del primer centenario de los Sitios
de Zaragoza. Y con fecha 1º de enero de 1910, el Excmo. Sr. Presidente del
Consejo de Ministros le expide otro diploma por el que se le concede la Medalla
de Plata conmemorativa del primer centenario de la gloriosa batalla de Puente
Sampayo. Por Real Orden de 3 de marzo de este año, fue ascendido al empleo de
Comandante, y por otra del siguiente día 18 de marzo, es destinado a la zona de
Madrid nº 1 en situación de reserva. Por diploma expedido por el Excmo. Sr.
Presidente del Consejo de Ministros, le fue concedida la Medalla de Plata con
distintivo morado, conmemorativa del primer centenario de los Sitios de Gerona.
Por otra Real Orden de fecha 17 de agosto se le asigna en su empleo de
Comandante mayor efectividad, o sea, la de 1º de marzo de 1909. Por otro
diploma expedido por el Excmo. Sr. Presidente del Consejo de Ministros el 10 de
diciembre siguiente, le fue concedida la Medalla de Plata conmemorativa del
centenario de los sitios de Astorga. Por otro diploma expedido por el Excmo.
Sr. Presidente del Consejo de Ministros el 19 de agosto de 1911, le fue
concedida la Medalla de Plata conmemorativa del bombardeo y asalto de la Villa
de Briguega y batalla de Villaviciosa. Por otro diploma expedido por el Excmo.
Sr. Presidente del Consejo de Ministros el 28 de diciembre de 1911, le fue
concedida la Medalla de Plata conmemorativa del primer centenario del sitio de
Ciudad Rodrigo.
En diciembre de 1910 toma en adopción
junto a su esposa doña María Antonia Ge, a los niños Teófila y Máximo Rodríguez
que han aparecido abandonados en las calles de Madrid, noticia que recoge la
prensa de la época (información que agradezco a Juan Bedoya Vargas). Su esposa fallecería el 4 de mayo de 1912. Posteriormente contraería un segundo
matrimonio con doña Inés Pérez Sastre.
Por Real Orden de fecha 10 de junio de
1912 es ascendido al empleo de Teniente Coronel; y por otra Real Orden de 22 de
junio siguiente, se confirma su destino en la zona de Madrid nº 1 en situación
de reserva. Por Real Orden de 21 de septiembre siguiente, se le concede la cruz
y placa de la Real y Militar Orden de San Hermenegildo, con la antigüedad de 4
de junio de 1897 y 24 de mayo de 1906, respectivamente. Y por otra de igual
fecha se le autoriza a usar sobre el uniforme las medallas de plata y oro de la
Cruz Roja Española.
Cruz de la Real y Militar Orden de San
Hermenegildo.
El 2 de octubre de 1912 marchó a Cádiz
para asistir a las fiestas del centenario de las cortes de dicha capital, tras las
cuales, permaneció unos días en Cártama, para regresar a Madrid el 25 de aquel mes.
Siendo Alcalde de Cártama don Diego
Rodríguez Díaz, se acordó en pleno municipal celebrado el 2 de abril de 1914,
la colocación de una placa de reconocimiento en su casa natal; y el siguiente
23 de abril, tras la función religiosa y sobre las tres de la tarde, la
Corporación Municipal de desplazó a la puerta de la casa donde nació don Manuel
Carillo, para la placa conmemorativa como hijo ilustre de Cártama.
El 23 de marzo de 1917 es declarado apto
para el ascenso a Coronel, cuando por antigüedad le corresponda; y el 4 de
diciembre se le concede el empleo de Coronel de Infantería.
Tras una enfermedad que le dejó sin
poder utilizar las piernas durante varios meses, finalmente falleció en Madrid,
el 7 de febrero de 1918.
Muy bueno
ResponderEliminarConocía la semblanza de este ilustre hijo de Cártama y a
ResponderEliminarlgo he escrito sobre él, pero nunca de la forma exhaustiva que el cronista lo hace en este trabajo. Tendré que leeerlo más detenidamente para anotar datos que seguramente ignoro. Cártama tiene una deuda de gratitud con "todos" sus hijos preclaros que es hora de ir saldando como pueblo bien nacido. Felicitaciones.